Cuatro expulsiones de jugadores del Ciudad de Murcia y un par de lesiones obligan al árbitro al suspender el partido en el minuto 70 con 0-2 en el marcador a favor del Lorca Deportiva.
Imposible medir el alcance del efecto Isaac Jove en el equipo lorquino por el extraño del encuentro que se disputó en la tarde del domingo en el polideportivo José Barnés de la capital de la región, con el ambiente habitual en los enfrentamiento entre estos dos equipos, más de 1000 espectadores en la gradas y dos aficiones dándoles color.
El minuto 11 con la expulsión directa de Sergio, por insultar al árbitro, se acabó el partido “normal”. Hasta ese momento el Lorca salió a por el partido con intensidad y presión. El debutante Isaac Jové salió con toda la artillería disponible, con Pico y Fran Minaya por bandas y un centro del campo menos poblado de lo que era habitual con García Tébar, con Heredia en la manija. Precisamente fue un buena internada de Pico por banda derecha la que acabó con el balón a ras de césped en la frontal del área donde Dani Ruiz pudo con un gran disparo colocar el esférico en la escuadra derecha del portero local consiguiendo su primer gol como lorquinista y abriendo, de esta forma, el marcador en el partido. Era solamente el minuto 3.
La expulsión, curiosamente, despistó más a los lorquinos que perdieron empuje. Los murcianos se acercaban con timidez e inocencia pero a balón parado descubrían fallos de marca que generaron un par de ocasiones que desbarató, muy seguro, Gerardo. Aún así las tres ocasiones más claras de la primera parte, fueron para los blanquiazules, un remate de cabeza al larguero de Ochoa, un remate fallido de Carrasco al borde del área pequeña y un gran disparo de Fran Minaya desde fuera del área que rechazaba el palo derecho del portero del Ciudad con el que terminaba la primera parte.
En la “mini” segunda parte el Lorca volvió a coger el mando del partido, controlando el balón y el juego, ante un Ciudad que quemaba sus últimas posibilidades de sacar algo positivo. Poco duró el fútbol. En el minuto 10 de la reanudación, un gran pase en profundidad de Campanas dejaba solo a Pico delante del portero y el defensa Juan Ramón se vio obligado a derriban al jugador lorquinista dentro del área. Penalti y expulsión. El Ciudad que se quedaba con 9. Carrasco convertía la pena máxima en el 0-2 para los lorquinos. El partido se enrareció definitivamente cuando Cánovas recibía su segunda tarjeta amarilla por una clara falta por detrás a Carrasco, dejando a su equipo con 8, poco después era Rubio el que se pasaba de frenada en una entrada sobre Guille obligando al árbitro a sacarle la segunda amarilla y dejar a su equipo con 7. En ese momento, los locales, mediante abandono por lesión a algunos de sus jugadores, certificaron la suspensión del encuentro al encontrarse el Ciudad con solo 6 jugadores sobre el campo.
Por lo tanto el partido terminó 20 minutos antes y el resultado final queda pendiente de la decisión del comité de competición, aunque lo normal será que se dé por ganado el encuentro a los lorquinos por 0-3.